"Este es mi consuelo en mi dolor:
Que tu promesa me da vida. "

- Salmo 119:50

¿Alguna vez se ha sentido decepcionado cuando un amigo miembro de la familia no cumple sus promesas? Cuando alguien dice que hará algo pero no lo cumple, ¿Cómo lo hace sentir eso?

Con cada promesa rota, ya sea grande o pequeña, importante o insignificante, la experiencia afecta la relación. La confianza es frágil con cada promesa rota, la confianza de una persona se desmenuza. Es difícil depender de personas en las que no podemos confiar que hagan lo que dicen.

En contraste, podemos depender de Dios. Dios cumple sus promesas todo el tiempo. Él es confiable y cumple Su Palabra. En Números 23:19, la Biblia escribe:

"GDios no es humano para mentir,
no es humano, para cambiar de parecer.
¿Él habla y luego no actúa?
¿Él promete y no cumple?"

El salmo 119 también discute la promesa de Dios varias veces. En el pasaje, el concepto del inquebrantable amor, esperanza, justicia, y salvación de Dios siendo una parte de esta promesa. También habla de la relación de nosotros como siervos de Dios que pueden permanecer inamovibles cuando somos puestos a prueba conociendo la promesa de Dios. Podemos alegrarnos, meditar y ser sostenidos en las promesas de Dios, y otros pueden temer conocer esa promesa de Dios. Nosotros, a su vez, podemos prometer obedecer las palabras de Dios y sus leyes.

Una promesa es poderosa cuando se mantiene, constantemente.

Reflexión: Tómese algo de tiempo y lea el Salmo 119. Note como la palabra promesa fue usada y lo que eso significa en su jornada de desarrollar su fe y relación con Cristo.

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Las promesas de Dios siempre se cumplen y podemos tener fe en Él porque Él siempre cumple Su Palabra. Reflexione cómo las promesas hablan de nuestras relaciones y como crean confianza. Mientras reflexiona el blog de esta semana, complete su experiencia de alabanza explorando la música de adoración en Christian Calm Radio.